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DESRATIZACIÓN
Los roedores suelen invadir cualquier lugar donde puedan encontrar
comida para sobrevivir y existen un grupo en especial que se denominan
sinantrópicos, por su capacidad de vivir en lugares urbanos gracias a
las comodidades que le otorga el ser humano.
1 – Análisis previo
Inspección: detectar si se trata de una plaga es buscar huellas,
excrementos, roeduras, animales muertos y ver si se oyen los correteos
de los ratones.
Identificación: permite dar un control específico según especie de
roedor identificada.
2 – Plan de acción
Prevención: acciones que eviten la aparición de ratas como por ejemplo
reparación de agujeros, tapas, cajas y sellado de huecos, cambios en
el almacenaje de la comida o basura que suelen ser los productos que
más buscan los roedores.
Limpieza: eliminar basura, escombros, cortar césped nos métodos que
permiten disminuir la plaga.
Control mecánico: Utilización de diferentes trampas en lugares estratégicos.
Control Químico: Uso de rodenticidas en diferentes formatos según
especie y lugar.
Seguimiento: después de realizar una desratización hacemos un
seguimiento para asegurarnos de que la plaga ha desaparecido.